Por ende, si surgen problemas en el matrimonio, la pareja necesita buscar la forma de enfrentarlos y superarlos. Casi siempre, si los dos cónyuges son sinceros en su deseo de mantener su matrimonio y cada uno pone algo de su parte, el matrimonio puede ser salvado.
“Colocad el fundamento de vuestro afecto en el mismo centro de vuestro ser espiritual, en el mismo corazón de vuestra conciencia, y no dejáis que sea sacudido por vientos adversos.
Finalmente, si tiene el deseo de casarse y siente que tiene la madurez espiritual para ello, pero no ha encontrado a nadie quien comparta las cualidades espirituales recomendables, puede ser muy beneficioso orar y pedir la ayuda y guía de Dios. Si no le viene una respuesta inmediata, debe tener paciencia y seguir orando y esforzándose en el desarrollo de sus propias cualidades espirituales. Puede ser que éstas no sean tan desarrolladas como se imagina, o que su destinado compañero espiritual necesita más tiempo para desarrollar las suyas antes de que se conozcan.
De esta forma una conversación clara y honesta, en que se expresa news eua tanto sus sentimientos de atracción como su dedicación al principio de la castidad estricta, puede hacer posible la expresión de afecto sin el temor de que la otra persona malinterprete sus motivos y deseos.
“El concepto bahá’í del sexo está basado en la creencia que la castidad debe ser estrictamente practicada por ambos sexos, no sólo porque es en sí altamente recomendable éticamente, sino también por ser el único comino a una vida marital feliz y venturosa. Las relaciones sexuales de cualquier tipo fuera del matrimonio no son permisibles.” 27
Para que cada miembro de la familia pueda desarrollar al máximo sus diversas capacidades espirituales, morales, intelectuales, artísticas, emocionales y físicas, precisa que en el ambiente hogareño exista tanto la unidad como la libertad.
Aún si la pareja se refrena de ese acto, deteniendo el proceso de su intimidad sexual en algún punto antes de llegar a las plenas relaciones sexuales, se tendrá que sufrir las consecuencias de deseos y tensiones sexuales aumentadas. Cuánto más frecuente y profunda haya sido la expresión de los deseos sexuales, a través de los distintos tipos de besos y caricias, más tensión sexual y emocional existirá en la relación. Esta tensión disminuye la capacidad de conocerse uno al otro objetivamente. Al mismo tiempo el aprecio mutuo de las cualidades espirituales poseídas por cada uno deja de ser la’ foundation principal de atracción y unidad en la relación.
Todo esto implica un cambio radical en la forma real de pensar y obrar. Para llevarlo a cabo en su vida, es necesario meditar profundamente sobre ello y hacer una decisión.
La responsabilidad también implica cierta madurez en la forma de manejar el dinero. Ni el derrochador que gasta todo sin pensar en las necesidades del mañana, ni el tacaño que guarda cada centavo y no le gusta gastar ni en las cosas necesarias, tienen una actitud responsable y madura hacia el dinero.
La felicidad en el amor ha sido un tema de interés constante. Cada joven y señorita sueña con su amor perfect; y muchos hombres y mujeres casados, felices o no, siguen buscando la fileórmula que transformará en realidad la dulce felicidad prometida por el concepto que tengan del amor.
“Antes del matrimonio, el estado great es el de castidad. La castidad necesita entreno miento ethical a temprano edad.
Sin temer las consecuencias. Porque en una amistad pueden surgir discusiones o pequeños disgustos. Los amigos pueden alejarse o no verse por un tiempo, y pueden volver a interaccionar nuevamente y no es gran cosa. No es traumático. En breve, en una amistad sincera no hay interés; así cada uno tiende a actuar con sinceridad y libertad.
Si uno ha captado correctamente los sentimientos del otro, ese comentario y la comprensión que ello demuestra le animará al otro para seguir platicando y para exponer más de sus verdaderos sentimientos. Asimismo, le puede ayudar a trascender estos sentimientos y a darse cuenta de otros sentimientos más profundos tras de ellos, y le puede dar valor para reconocer sus propios errores.
El matrimonio puede y debe ser la relación más satisfactoria en la vida de cada persona. Puede ser una fuente de unidad, felicidad y comprensión. Puede ser una fortaleza de bienestar en temporadas de problemas, y un centro de inspiración y decisión para enfrentar estos problemas.